Murió el capo de Cosa Nostra italiana Matteo Messina Denaro, prófugo de la justicia por más de 30 años

El capo italiano Matteo Messina Denaro murió este lunes en el hospital de San Salvatore en la ciudad de L’Aquila, en el centro del país, a causa de un cáncer de colon y ocho meses después de su detención.

Su salud se deterioró hace un mes después de dos operaciones y, además de encontrarse sedado desde hace unos días, las visitas familiares habían sido suspendidas, según informó la televisión estatal italiana Rai.

Mesina Denaro fue, hasta su detención el pasado mes de enero, uno de los últimos grandes padrinos de la Cosa Nostra y prófugo de la Justicia desde hacía tres décadas.

Tras agravarse su salud, fue trasladado a la unidad para presos del hospital de esa ciudad, en medio de fuertes medidas de seguridad.

Desde su arresto había sido interrogado por los fiscales de Palermo en numerosas ocasiones, aunque en ningún momento llegó a colaborar.

El criminal había dejado un «testamento biológico» o documento de últimas voluntades en el que pide que no se le alargue la vida mediante tratamientos o máquinas.

«No quiero ser un superhombre, ni siquiera arrogante; me cogisteis por mi enfermedad», llegó a declarar el capo italiano durante uno de los interrogatorios, en referencia a que su detención se produjo después de que acudiera con un nombre falso a la clínica La Maddalena para que recibiera su tratamiento contra el cáncer.

Durante su agonía en el hospital estuvo acompañado por su hermana Giovanna, su sobrina y abogada Lorenza Guttadauro, y por su única hija legítima conocida, Lorenza, de 27 años y a la que vio por primera vez el pasado abril cuando fue a visitarlo a prisión.

Su actividad delictiva se remonta a la década de los ochenta, cuando no había cumplido 30 años, y marcó a algunas zonas del país durante décadas, por lo que la Justicia le condenó a dos cadenas perpetuas.

La última de ellas deriva de su conexión los asesinatos en 1992 de los jueces Giovanni Falcone y Paolo Borsellino, en dos tragedias históricas de la lucha de las autoridades italianas contra el crimen organizado durante la década de los noventa.

Aunque esta condena subraya que el mafioso no tuvo ningún papel en la ejecución de los atentados que acabaron con la vida de los jueces, las masacres de Capaci y Via D’Amelio, sí concluyó que el mafioso ofreció ayuda para vigilar a los magistrados en el momento en que el gran responsable de los ataques, Salvatore Riina, decidiera lanzar las operaciones.

*Con información de Europa Press.

Los invitamos a seguir el canal de SinCandado en WhatsApp. Activen la campanita. https://whatsapp.com/channel/0029Va5h18bL2ATvVS9cpQ1S

Nos encuentran en Twitter en @candado_sin y en Instagram en @sincandadocom

Deja un comentario

Entradas recientes